Los animales, los otros profesionales de lo social

 ¡Hola Meninos y Meninas!

 Hoy voy a hablar sobre los animales de compañía, especialmente de los gatos y los perros que son mis preferidos. 

 Los animales son una parte muy importante en la vida de muchas personas, y la mayoría les consideran como parte de la familia. Según algunas investigaciones más de un 60% de la población tiene un animal de compañía en su casa. Se ha demostrado que nuestras mascotas nos aportan muchos beneficios a nuestra salud mental y emocional y según algunas investigaciones mejoran muchos aspectos de nuestra salud física.

 Nuestras mascotas nos dan cariño, nos ayudan a levantar el ánimo, no nos juzgan ni nos cuestionan, ni se ríen de nosotros/as. Y tampoco nos discriminan por nuestro aspecto físico o por los errores que cometemos.

 Las mascotas evitan que tengamos sentimientos de soledad, gracias al afecto constante e incondicional que nos ofrecen, o por el simple hecho de acompañarnos; hacen que las personas se sientan protegidas.

 Es normal que los compañeros/as, (como a mi me gusta llamar a todos/as los que tenemos animales), den instrucciones o hablen con sus mascotas; y aunque sabemos que no nos contestan con palabras, sentimos que lo hacen con su lenguaje propio y nos hacen sentir acompañados/as.

 A veces, cuando las personas se sienten deprimidas y no tienen ganas de hacer nada, si tienen una mascota en casa están obligadas a atenderla y por tanto a moverse, interactuar con ella, e incluso, en caso de los perros a salir, por lo que favorecen las relaciones de amistad con otras personas que también pasean a sus perros. Algunos estudios han revelado que jugar con las mascotas y acariciarlas con frecuencia ayuda a disminuir los niveles de estrés, ansiedad y depresión; por lo que es aconsejable acariciar, jugar, pasear e incluso hablarles para despejar la mente y sentir bienestar. 

 Los animales necesitan de nuestros cuidados, lo que hace que nos volvamos más responsables y nos sintamos satisfechos/as por el cuidado que les profesamos. También nos hacen más empáticos/as, pues muchas personas pensamos que nuestras mascotas tienen las mismas necesidades que los humanos y los mismos estados de ánimo; intuimos que tienen frío, están tristes, alegres, cansados o enfadados.

 Las mascotas son compañeras de juegos de niños/as; crecer con una mascota es una oportunidad para enseñarles a ser responsables y a respetar a los animales. Se ha observado que niños/as con alguna dificultad, al leer en voz alta delante de sus mascotas, refuerzan su seguridad y confianza en sí mismos/as, ya que las mascotas no se van a reír de cómo lo hacen o si se equivocan. 

 A raíz de los muchos beneficios que aporta tener una mascota en nuestra vida, surgen las terapias con animales o zooterapias, que son intervenciones terapéuticas llevadas a cabo con la finalidad de mejorar la calidad de vida de las personas. Se utilizan en multitud de patologías, entre ellas: trastornos emocionales como la depresión, autismo, Síndrome de Down, ansiedad, parálisis cerebral, demencias, etc.

 Estas terapias se suelen utilizar sobre todo con animales del hogar, como el perro o el gato, aunque también se está investigando y utilizando otros animales como caballos y delfines; arrojando todas ellas resultados muy beneficiosos para la salud.

 Desde muy pequeños los niño/as deben de aprender a respetar a sus mascotas, este es un buen principio para luchar contra el maltrato animal, que alcanza cifras extremas y muy alarmantes.

 Hay que hacer comprender a los niños/as que un animal no es un juguete, ni un peluche, que es un ser vivo que necesita amor y cuidados y que se puede convertir en tu compañero/a y amigo/a para siempre. Para ello, los padres/madres deben de dar ejemplo, ya que ellos/as son un modelo a seguir para sus hijos/as.

 Yo soy partidaria de adoptar a un animal en vez de comprar, pues hay infinidad de animales abandonados en refugios y protectoras, que están esperando que alguien les adopte, y se merecen una oportunidad. Muchos de estos animales han acabado ahí por la compra masiva e impulsiva que suele hacerse, y después, pasada la novedad y vistas las responsabilidades que implican, muchos acaban abandonados, sin familia y con un futuro lamentable.

 Por ello, aparte de enseñar a los niños/as a respetar a los animales, es bueno que aprendan que adoptar o comprar una mascota implica unas responsabilidades para toda la vida. Hay que enseñarles que poco a poco se impliquen en las tareas de ponerle la comida, cambiarle el agua, peinarlo, lavarlo, llevarle al veterinario/a, sacarle a pasear y por supuesto darle mimos, educarlo y disfrutar de su compañía. Esto les convertirá en adultos más responsables.

 Aunque existe la creencia errónea que es en verano cuando más abandonos de animales se producen, lamentablemente este acto tan cruel se realiza durante todo el año.

 El abandono de un animal no es solamente un acto miserable, sino que, tras la Reforma del Código  Penal, en virtud de la Ley Orgánica 1/2015, de 30 de marzo, es un delito que se constituye como un tipo atenuado de maltrato de animales, regulándose en el Art. 337bis del Código Penal vigente, con el siguiente contenido. (BOE. 2021).

 "El que abandone a un animal de los mencionados en el apartado 1 del artículo anterior, en condiciones en que pueda peligrar su vida o integridad, será castigado con una pena de multa de hasta seis meses. Asimismo, el Juez podrá imponer la pena de inhabilitación especial de tres meses a un año, para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con animales y para la tenencia de animales"

 La conducta tipificada en el delito de abandono de animales es abandonar al animal en condiciones en que pueda peligrar su vida o integridad. Se entiende tanto el abandono físico del animal (expulsión física del hábitat humano del animal con intención de deshacerse de él), como el abandono funcional o inobservancia del cumplimiento de las obligaciones que el poseedor/a o propietario/a tienen como garante respecto al animal.

 Tristes ejemplos de abandono físico son el abandono del animal en la vía pública, carreteras, lugares aislados, etc., como la omisión del cumplimiento de las obligaciones básicas de alimentación, cuidado y alojamiento del animal. Por tanto, cabe su comisión por acción y por omisión, bastando con que la conducta cause desamparo en el animal.

 Es importante señalar que si el abandono se materializa en lesiones o muerte del animal, estaríamos ante un delito de maltrato animal (artículo 337 del Código Penal.)

 Por otra parte, la Ley Orgánica 4/2015, de 30 de marzo, de Protección de la Seguridad Ciudadana, contempla como infracción leve, en su artículo 37.16, el abandono de animales domésticos en condiciones en que pueda peligrar su vida, sancionando dicho acto con una multa de 100 a 600 euros. (BOE, 2021).

 Está claro que abandonar un animal en España sale prácticamente gratis.

  Por ello hay que seguir insistiendo en el aumento de penas de los delitos de maltrato y abandono de animales, así como en el incremento de las multas, y en el cumplimiento de las obligaciones de tenencia responsable de los animales, tales como identificación del animal, y, para evitar camadas indeseadas, la esterilización de los animales.

 Igualmente sería deseable que las Administraciones promuevan campañas de concienciación social y educación responsable sobre los animales.

 Un animal no es una cosa, es un ser vivo, dotado de sensibilidad que siente y sufre consecuencias terribles cuando es abandonado a su "mala" suerte; la mayoría acaban atropellados, vagando para buscar alimentos, o cerrando los ojos en cualquier descampado, esperando, quizás, volver a ver a su querido compañero/a... que nunca regresará.

 Las protectoras de animales están haciendo un trabajo encomiable, desarrollando actividades de carácter asistencial, como instalar refugios para acoger a los animales abandonados, fomentar la adopción; de carácter cultural, como concienciar a la sociedad en general del respeto del que los animales son objeto, promover conductas tendentes a suprimir actos de crueldad y violencia sobre ellos; de carácter legislativo, como proponer a la autoridades competentes proyectos legislativos relativos a animales domésticos; y de carácter sanitario, como velar por el cumplimiento de las normas sanitarias que redunden en beneficio de los animales.

 He estado muchos años siendo voluntaria de la Protectora de Animales de Cáceres, así que os dejo el enlace de la asociación, donde podréis encontrar mucha información sobre estas y otras cuestiones.  También por si estáis interesados/as en ayudarles:

https://protectoradecaceres.es/

 Para terminar, quería dedicar esta entrada a mi compañero desde hace diez años, mi gato Manolo, le encontré cuando solo tenía dos meses y desde entonces somos inseparables. Gracias a él, ningún día es un mal día, siempre me saca una sonrisa y me siento afortunada de haberle encontrado. Solo espero que se cumpla ese dicho de que los gatos/as tienen siete vidas y espero que esas siete las viva a mi lado.

 Os dejo una foto suya para que le conozcáis.



 ¿Vosotras/os tenéis animales? Espero vuestras opiniones y si os animáis a colgar fotos con ellos, mejor!




Webgrafía:


Comentarios

  1. Hola Mª José, tu publicación me ha parecido maravillosa y muy detallada. No solo has expuesto que tener un animal de compañía ayuda a la salud sino que haces un llamamiento a las administraciones publicas para que solucionen mejor esta problemática. Además mencionas que se utilizan terapéuticamente a lo que quiero añadir que la equinoterapia ayuda mucho a las personas con discapacidad, es con caballos, y es una formas de ayudarles tanto física como emocionalmente. Compartos todas las ideas y cuestiones que has comentado ya que soy una gran amante de los animales. Enhorabuena por tu publicación compañera.

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  2. Hola Nerea!, muchas gracias por tu comentario y por la aportación sobre la terapia con caballos, es muy interesante. Me alegra saber que compartimos los mismos gustos.
    Un saludo compañera!

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  3. ¡Hola Mª José!
    Te felicito por esta entrada tan maravillosa.
    Las mascotas, en mi caso un gato, son parte importante de la vida de muchas personas y tengo la suerte de decir que me incluyo entre esas personas.
    Gracias a ellas, como mencionas, un día puede pasar de ser malo a ser el mejor por su cariño y compañía incondicional sin importar cómo seas.

    Desde luego estoy completamente a favor de la adopción de animales y no de comprar ya que a diario podemos leer mensajes sobre sacrificios de estos por diversas causas.
    Sobre el abandono y maltrato de mascotas y animales en general, es una pena que siga ocurriendo a día de hoy y que los autores de estos hechos puedan seguir con normalidad.

    Gracias por tu importante aportación!

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    1. Hola Desirée!! muchas gracias por tus palabras, coincido contigo en que siempre es mejor la adopción a la compra de animales y que debería haber penas más duras con las personas que los maltratan. Te animo a que nos pongas una foto de tu gato!

      Un saludo amiga gatuna!!

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